El nuevo refuerzo de los Leones del Caracas ya está en el país, listo para sustituir a Josh Thole
Hudgens dice que será activado el 8 de diciembre
Hudgens dice que será activado el 8 de diciembreCARACAS.- Chris Giménez fue medido, pesado y evaluado este año en las Grandes Ligas y fue encontrado deficiente.
Su promedio al bate, un famélico .141 en 140 turnos con los Indios de Cleveland, fue todo un pelotazo a la cabeza directo a su ego peloteril.
“Fue un año muy duro. Nunca en mi carrera profesional había estado jugando ese rol de jugador suplente y eso creo que me afectó. Sentí que perdí la confianza con el bate”, confesó el norteamericano vía telefónica.
Hoy, ya en tierras venezolanas, Giménez viene a lamerse las heridas con el uniforme de los Leones del Caracas conquistando a la fanaticada melenuda mientras recobra una musa ofensiva que le permitió batear .339 de AVG y .487 de OBP en 233 turnos con el Akron Aeros (filial AA de los Indios en el 2008.
“Sé que puedo rendir. Sé que mi swing está en forma en estos momentos y en la parte defensiva estoy seguro que puedo ayudar a la novena”, afirmó convencido Giménez desde un hotel capitalino.
Pero superar ese bache emocional que le infligió su primera experiencia en las mayores es un herculiano objetivo alcanzable sólo si aprueba con éxito un par de tareas. Suplantar al León de Meneas, Josh Thole, en el lineup melenudo es la primera de ellas. Después de todo el catcher saliente es actualmente el líder bate de la LVBP.
“¿En serio? Wao, no sabía eso. Thole es un gran jugador y definitivamente van a ser unos grandes zapatos que llenar. Espero poder hacerlo bien. No les voy a mentir, no creo que batee 400. Pero creo con lo que puedo hacer detrás del plato y con un promedio que ronde los .300 estaré bien”, comentó con honestidad.
De lograr semejante gesta Giménez estaría bien encaminado para superar su siguiente prueba; ganar el corazón de la Hidra de mil cabezas de los graderíos caraquistas.
“He escuchado tanto sobre esta liga. Jordan Brown, uno de mis mejores amigos, me dijo que la intensidad y el nivel que voy a ver es lo más cercano a las Grandes Ligas. Sólo espero que la fanaticada me trate bien y me de un poco de tiempo. Sólo un par de días para aclimatarme porque ya vengo entrenado desde California ”, declaró el anglosajón quien afirmó que ha traído a su esposa para que lo acompañe en estas pruebas que se le avecinan.
En lo que será su primera incursión en el beisbol del Caribe, Giménez concluyó que espera lo mismo que enfrentó este verano en las mayores pero con una sola diferencia: el resultado de su experiencia. “Me comentó John Nunnally (instructor de bateo de los Leones) que vería pitchers agresivos y muchos sliders. Estoy listo para eso”.
Su promedio al bate, un famélico .141 en 140 turnos con los Indios de Cleveland, fue todo un pelotazo a la cabeza directo a su ego peloteril.
“Fue un año muy duro. Nunca en mi carrera profesional había estado jugando ese rol de jugador suplente y eso creo que me afectó. Sentí que perdí la confianza con el bate”, confesó el norteamericano vía telefónica.
Hoy, ya en tierras venezolanas, Giménez viene a lamerse las heridas con el uniforme de los Leones del Caracas conquistando a la fanaticada melenuda mientras recobra una musa ofensiva que le permitió batear .339 de AVG y .487 de OBP en 233 turnos con el Akron Aeros (filial AA de los Indios en el 2008.
“Sé que puedo rendir. Sé que mi swing está en forma en estos momentos y en la parte defensiva estoy seguro que puedo ayudar a la novena”, afirmó convencido Giménez desde un hotel capitalino.
Pero superar ese bache emocional que le infligió su primera experiencia en las mayores es un herculiano objetivo alcanzable sólo si aprueba con éxito un par de tareas. Suplantar al León de Meneas, Josh Thole, en el lineup melenudo es la primera de ellas. Después de todo el catcher saliente es actualmente el líder bate de la LVBP.
“¿En serio? Wao, no sabía eso. Thole es un gran jugador y definitivamente van a ser unos grandes zapatos que llenar. Espero poder hacerlo bien. No les voy a mentir, no creo que batee 400. Pero creo con lo que puedo hacer detrás del plato y con un promedio que ronde los .300 estaré bien”, comentó con honestidad.
De lograr semejante gesta Giménez estaría bien encaminado para superar su siguiente prueba; ganar el corazón de la Hidra de mil cabezas de los graderíos caraquistas.
“He escuchado tanto sobre esta liga. Jordan Brown, uno de mis mejores amigos, me dijo que la intensidad y el nivel que voy a ver es lo más cercano a las Grandes Ligas. Sólo espero que la fanaticada me trate bien y me de un poco de tiempo. Sólo un par de días para aclimatarme porque ya vengo entrenado desde California ”, declaró el anglosajón quien afirmó que ha traído a su esposa para que lo acompañe en estas pruebas que se le avecinan.
En lo que será su primera incursión en el beisbol del Caribe, Giménez concluyó que espera lo mismo que enfrentó este verano en las mayores pero con una sola diferencia: el resultado de su experiencia. “Me comentó John Nunnally (instructor de bateo de los Leones) que vería pitchers agresivos y muchos sliders. Estoy listo para eso”.
Fuente: http://www.liderendeportes.com/Noticias/?id=90979&sid=67
Lunes 30 de noviembre de 2009 6:51 AM
Por Octavio Hernández Pernía - Foto AP
Lunes 30 de noviembre de 2009 6:51 AM
Por Octavio Hernández Pernía - Foto AP
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