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La pelota entra en la candela de la recta final

Caracas y Magallanes están cómodos y se comerán las hallacas sin presión

El campeonato descansó por dos días debido al Juego de Estrellas. Por eso es menester analizar lo que puede suceder en estas cuatro semanas que quedan de campeonato.
El torneo puede picarse en tres: dos equipos luchando por la punta y prácticamente clasificados, Caracas y Magallanes; cuatro clubes con un chance de entrar al round robin si se mantienen en o cerca de los .500, Zulia, Margarita, La Guaira y Aragua, peleando por entrar entre el tercer y quinto peldaños; y Lara y Anzoátegui, muy lejos de la clasificación, con demasiadas derrotas a sus espaldas, 28 y 30 respectivamente, pero aún con chance matemático.
Nadie puede predecir el futuro. Sobre todo ahora, cuando vienen cambios en los importados de clubes como el Caracas y se suman figuras importantes a los clubes cimeros. Sin embargo, no contarán con Edwin Moreno, quien desde hoy estará chequeándose el brazo con los doctores de los Medias Rojas de Boston. Caracas tiene 6,5 juegos por encima del tercer puesto.
Eso les da una ventaja enorme a la hora de cualquier debacle.
Tanto avileños como valencianos andan con 30 victorias.
Por las combinaciones de juego que quedan, el ganar 33 es un seguro para la clasificación. Sobre todo porque los de abajo clasificarán, uno o quizá dos clubes, con un promedio de menos de .500, es decir con 31 y 32. Así lo indican los cruces entre ellos.
Ambos van por la vanguardia.
Se verán la cara el domingo y el martes en Caracas. Los del Cabriales ya ganaron la serie particular este año, la tienen 5-2, pero eso no es suficiente. La idea es terminar en el liderato para poder agarrar los mejores peloteros posibles en la ronda de sustituciones. El domingo y el martes chocarán por última vez este año en el Universitario.
Los dirigidos por Dave Hudgens confían en que la salida de Josh Thole y Jhoulys Chacín no afectarán su juego diario. Son el único equipo con bullpen suficiente para aguantar cualquier arremetida. Ahora contarán con Armando Galarraga y Franklin Morales.
Águilas tiene que sacar partido de los cinco compromisos que tendrán como home club en sus próximas seis presentaciones.
Estarán en el Luis Aparicio "el Grande" desde hoy y hasta el viernes. Sábado y domingo jugarán en Miami contra Lara.
El 8 y 9 regresan a su lar para luego irse de gira. Del 15 al 17 se despedirán de su hogar. Son 9 partidos apenas que le quedan como locales. Su récord en casa es de 11-11. ¿Podrán resistir las acometidas de sus rivales? Hoy y mañana van contra Aragua. La Guaira los visitará en el comienzo martes y miércoles de la semana de arriba. Todos estos clubes son rivales directos de los rapaces. En sus manos está la clasificación. Con 25 victorias y un total de 18 cotejos por quedarse, la mitad le basta y le sobra. Con eso pasan a la segunda vuelta del campeonato.
Hace una semana, Bravos lucía cómodo, pero perdieron tres de cuatro con Caribes, y cinco de seis en la semana y se colocaron a un juego de La Guaira. Lo malo es que se miden hoy al Magallanes y mañana al Caracas como visitantes. Lo bueno es que luego viajan a su estadio para medirse a Caribes (2), Navegantes (2) y Tigres (2). Debe ganar mínimos cuatro de esos para seguir luchando, sobre todo con los que están debajo de él.
Sus cuatros compromisos finales serán dos contra Tiburones y dos contra Águilas. Esas son buenas noticias para Luis Dorante. De él y sus pupilos dependerá comerse las hallacas clasificados.
Tiburones cuenta ahora con Ronald Belisario y Francisco Rodríguez, pero esto no ha sido suficiente: siguen siendo el peor pitcheo colectivo del torneo.
La esperanza de que funcione el bullpen le permite a Carlos Subero y compañía soñar con jugar en enero. Su efectividad colectiva es de 5.85, pero son los segundos mejores en bateo con .296.
Quizá la adición de sus dos bigleaguers de más renombre, el despertar de Max Ramírez y los nuevos pitchers importados que se han sumado les permitan a los salados mantenerse en la clasificación tan anhelada.
Casi todos los compromisos que le quedan (18), salvo cinco juegos contra el Caracas y dos contra Magallanes, son contra rivales directos.
Tigres de Aragua son tres palabras que espantan. Nadie quiere que clasifiquen. Son los machos, los monarcas de los tres últimos campeonatos y con una cualidad muy particular: crecerse en las adversidades. Acaban de contratar a un pitcher AAA, John Van Buren, para que los refuerce aún más en el bullpen. Lo malo es que sólo les resta un careo contra los escualos.
Le quedan cuatro compromisos contra el Zulia, y la serie va 4-1 a favor de los aragüeños. Allí puede estar su tabla de salvación. Con 19 choques por delante y 19 victorias únicamente, deben ganar en 11 ocasiones para quedar en 30 triunfos, el cual sería el número mágico para clasificar, o por lo menos para optar por un juego extra, sobre todo porque Lara y Caribes suman 28 y 30 derrotas respectivamente.
El año pasado estaban en una situación similar y ganaron tanto que acabaron de terceros. ¿Podrán hacerlo? Tenemos cinco años viendo la misma película.
¿Qué decir de los sotaneros? No tienen cómo maniobrar. Muchos resbalones.
La clasificación luce lejana para ambos clubes.

Fuente: http://www.ultimasnoticias.com.ve/capriles/cadena-global/detalle.aspx?idart=2724737&idcat=56752&tipo=2
Por ALFREDO VILLASMIL FRANCESCHI - Foto ARCHIVO
miércoles, 02 diciembre 7:52 AM

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