El Caracas sacudió a La Guaira por 14-5 para conquistar su cuarto logro al hilo
El encuentro estuvo plagado de emociones. Los infielders debieron lucir ante la cantidad de batazos que se vieron ayer en el Universitario
Qué importa si tres de sus jugadores importados están lesionados. Qué importa si cometen cinco errores. Qué importa si reciben dos cuadrangulares de Jason Dubois. Los Leones del Caracas están inspirados, si no que le pregunten a los trasnochados Tiburones de La Guaira, tras recibir esa paliza de 14 por 5.
"No queríamos estar por allá abajo en la tabla. Ya vamos por donde queremos, porque la idea es llegar tranquilos a diciembre", dijo Jesús Guzmán, quien impulsó seis carreras con cuadrangular y doble.
El designado demuestra cada día su liderazgo. En la víspera ante el Magallanes, su agresividad en las bases causó el triunfo por 2-1. "Hoy no me tocó correr", bromeó. "Las conexiones salieron".
Los que también salieron, fueron los fanáticos de Tiburones de La Guaira del estadio, cuando a Guzmán se le ocurrió conectar ese Grand Slam en el octavo capítulo, que puso la pizarra 10-2. Había lluvia, la de las nubes encapotadas, y la otra, la proveniente de los bates caraquistas.
Pero en la tribuna de la izquierda, el clima era radiante, pues ya se celebraba la cuarta victoria seguida.
Es que su equipo está tan bien, que hasta Bubba Bell produjo. Que no se moleste el importado, pero antes de este juego solo había conectado 2 hits en 17 turnos. Y ayer se fue de 5-4 con par de remolcadas. "La situación no pudo estar peor para mí. Había muchos abucheos del público y tenía presión por producir rápidamente".
Que se quede tranquilo el jardinero, porque desde que llegó Gregorio Petit, el Caracas ha vuelto a demostrar ese poder colectivo que lo llevó a las últimas dos finales.
"Petit", confirmó el manager Dave Hudgens, cuando se le preguntó por la causa de estas cuatro conquistas al hilo. "Él hace que las cosas sucedan. Además le ha dado mucha estabilidad al infield".
Donde no hubo estabilidad fue en el relevo de La Guaira. Cuando el abridor Henderson Álvarez se fue a las duchas, con él se fueron las esperanzas de ganar para Tiburones.
Los locales se desplomaron de una forma tal, que cuesta creer que llegaron a estar arriba por 2-0 en el tercer inning.
Los de Carlos Subero tuvieron un complicado viaje de regreso desde Barquisimeto. A las 4:30 de la mañana aproximadamente, arribaron a Caracas, de hecho algunos durmieron en el clubhouse. Pero no hubo nada más incómodo, que recibir ese castigo del Caracas y continuar en el último lugar de la tabla, ya con 8 derrotas.
Mientras tanto, el Caracas luce cómodo, viajando en primera clase con unos boletos que dicen "primer lugar".
Fuente: http://deportes.eluniversal.com/2010/10/25/beive_art_leon-inspirado_2080789.shtml
JOSÉ MANUEL FERNÁNDEZ | EL UNIVERSAL - Foto Nicola Rocco
lunes 25 de octubre de 2010 12:00 AM
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