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Los Leones del Caracas quedaron a un juego de su objetivo en la zafra
El equipo melenudo no pudo rematar una gran campaña regular

Un juego, apenas un juego marcó la diferencia entre alcanzar el objetivo y quedarse con el vacío de no coronarse.
Los Leones del Caracas vieron en los últimos dos encuentros de la final cómo el título se les fue literalmente de las manos.
Aquel enorme cuadrangular de Jesús Guzmán en el sexto desafío parecía ser la guinda dorada de una campaña soñada para los melenudos.
Era, en otras palabras, el Más Valioso de la cosecha, poniendo a su equipo en ventaja y enfilándolo hacia el título.
Aquello fue tan contagioso en el mundo caraquista, que Jackson Melián se unió a la fiesta con otro vuelacerca.
Pero qué va, lejos de ser la antesala de una parranda mayúscula en la capital, marcó el antes y después de la serie final.
"La defensiva nuestra estuvo terrible, hubo muchos errores mentales en el terreno", comentó el manager Frank Kremblas, luego de ver cómo sus guiados, con un desfile de perfiladas, le volvieron a abrir la puerta a los Tigres.
Un día después, parecía que el Caracas retomaba el camino hacia el título, al contar de nuevo, y de forma casi providencial, con los servicios de su as Juan Carlos Gutiérrez.
Al momento que el mejor pitcher criollo de la temporada regular saltó al terreno y levantó sus dos brazos para saludar a la afición, el libreto parecía sonreírle al conjunto local.
La vibra, a simple vista, parecía tenerla de su lado, sobre todo porque en la otra esquina estaba un Jeff Farnsworth con dos días de descanso.
Pero el Caracas se estrelló con el destino. Un cuadrangular de tres carreras de Matt Tolbert, quien estaba en acción, gracias a que Luis Rodríguez fue "parado" por San Diego, resumió quién era el conjunto con la suerte de su lado.
En la ofensiva, los melenudos se estrellaron con su propia ansiedad, y vieron como el tiempo, los innings y la presión fueron comiendo sus esperanzas.
Es que con el madero, el Caracas no pudo rendir en la fase final. De hecho, los cinco mejores bateadores de esta serie fueron de los Tigres de Aragua.
Alex Cabrera abrió los ojos, pero no despertó a sus compañeros, quienes vieron cómo se estancaron con un modesto average de .238.
Las múltiples lesiones y limitaciones de las organizaciones en Estados Unidos fracturaron la rotación de abridores de Kremblas. Por ello tuvieron que darle la bola en dos ocasiones al sustituto Vladimir Núñez, quien no cumplió con las expectativas. El mejor equipo de la regular terminó dependiendo en demasía de sus refuerzos.

Por JMF - Foto Vicente Correale

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