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Fue el grito del campeón en el Universitario - ¿Ahora… Caracas, dónde está tu "hacha"?

El que ríe de último ríe mejor y nadie rió más alto y duro que los Tigres de Aragua, quienes le enseñaron a los Leones quienes son los reyes de la selva, mientras se lo restregaron en la cara a su fanaticada

Cuando la rodilla de Héctor Giménez tocó la tierra cerca de la primera base en el estadio de la UCV y alzó sus brazos al cielo, sólo significó una cosa: los Tigres de Aragua se coronaban tricampeones de la LVBP.
Imaginamos que la caminata de Gregorio Petit desde la raya del jardín derecho al dugout de los Leones en el extremo opuesto por la tercera base, entre más de dos docenas de jugadores de los rayados que celebraban y se abrazaban en el medio del montículo, debió ser la más larga de su vida.
Aragua había sentenciado finalmente una intensa rivalidad con el Caracas de la mejor forma, logrando el tricampeonato, en casa de los Leones, luego de pasarles por encima en el sexto y séptimo juego de la final, en definitiva, venciendo a los melenudos, frente a su afición, en tres de los cuatro encuentros que se disputaron en el Universitario en la final.
No hay nada más que decir aparte de lo que fue obvio, los Tigres desearon, buscaron y lucharon mucho más por el campeonato que los Leones del Caracas y eso quedó claro en el sexto y séptimo juego.
Los Tigres le hicieron al Caracas exactamente lo mismo que los Leones le habían hecho a ellos en la temporada 2005-2006, ganarles a punta de garra y corazón.
Tanta hostilidad dentro y fuera del terreno entre ambos equipos solamente podría tener un ganador y lo fueron los Tigres de Aragua.
¿DÓNDE ESTÁ TU HACHA?
Ya montados en la tarima, los tricampeones abrazos, saltando y celebrando tuvieron un mensaje para la poca afición de los melenudos que se mantuvo incrédula en el estadio: "¿Ahora… Cacarañas dónde está tu hacha?
Con este grito de victoria le restregaron a una fanaticada dolida el triunfo en patio ajeno, aquel que quizás nadie más que los seguidores de los Leones lo sintieron.
Cierto es que la relación entre la fanaticada del Caracas y los jugadores de los Tigres de Aragua siempre fue hostil, hasta el punto que los aficionados casi nunca se quedaron siquiera con un foul de los bates de los rivales.
Tirando las pelotas que botaban de foul los Tigres de nuevo al terreno y gritando sin parar a los rivales la afición se hizo sentir hasta el punto que lanzaron objetos al terreno de forma irresponsable.
Pero también cierto es que los jugadores de Aragua tuvieron parte en culpa de provocar a la afición rival y el guinde sobre la torta fue ese corillo ya montados en la tarima, junto con otras cosas que gritaron que en estas líneas no podemos repetir.
En definitiva los Tigres le ganaron no sólo la batalla al Caracas en la final, sino a los aficionados y se lo restregaron de la mejor manera, celebrando el tricampeonato en Caracas y coreando en tono de burla lo que fue el grito de guerra del Caracas todo el año.
EL VERDADERO REY DE LA SELVA
Cuando en la campaña 2005-2006 los fanáticos rayados tildaron de "sopita" a los Leones del Caracas, estos respondieron al ganar cuatro seguidos, el campeonato y la Serie del Caribe.
En esta temporada los Tigres se vengaron a lo grande, luego de perder dos de los tres encuentros en Maracay, fueron a Caracas a no pensar en desventaja y ganar el sexto y séptimo juego en la UCV.
De esta forma le propinaron a la fanaticada del Caracas quizás la más dolorosa derrota de su historia, apenas detrás de las dos caídas ante el Magallanes en finales.
Esta final de felinos demostró quién es el verdadero rey de esta selva que es llamada la LVBP, al lograr el tricampeonato que en la 2005-2006 le negaron los Leones y venciendo en la tercera final del siglo a los melenudos.
Tigres parte hoy a México a buscar el único trofeo que les ha sido esquivo durante su siglo de dominio, el de la Serie del Caribe, que esperan conseguir como representantes de Venezuela en México.
Aragua ratificó esta campaña, al lograr el trofeo sin Miguel Cabrera, que no tiene más nada que demostrar en la LVBP y que solamente necesita enseñar su supremacía en el Caribe.
El año que viene tendrán la oportunidad de lograr algo que nunca se ha alcanzado en la LVBP, cuatro títulos seguidos.
SEÑOR DE LOS ANILLOS
Alex Delgado ha sido siempre una pesadilla para los Leones del Caracas, nuevamente celebra a expensas de ellos logrando otro título en la ciudad capital, y completa nueve anillos en total.
Sin embargo vencer repetidamente al Caracas no le ha quitado las ganas de disfrutarlo, fue uno de los primeros en hacer la señal del hacha una vez terminado el encuentro.
PRIMERO AL TERRENO
Las distintas gráficas de los diarios deportivos o no reflejaron el momento en que Miguel Cabrera, a pesar de no jugar este año, fue uno de los primeros en saltar al terreno a celebrar.
Los Tigres alcanzaron el trofeo sin su ayuda, pero esto no significo que este no estuviera presente para apoyar moralmente en todo momento e inclusive amenazar varias veces con jugar.
EL QUE RÍE DE ÚLTIMO
Aunque no lo revele mucho, Buddy Bailey debe haber amanecido ayer con una gran sonrisa pintada en su rostro, luego de ganarle la batalla a Frank Kremblas, con lo que calificó como el "mejor equipo que ha tenido".
Bailey y Kremblas estuvieron en el medio de una gran rivalidad felina, que finalmente se la llevó Bailey, quién ahora alcanza cinco anillos como campeón en Venezuela.
SE METIO EN EL PODIO
Con esa victoria ante los Leones del Caracas los Tigres de Aragua, ahora con ocho campeonatos en la LVBP, se meten en el podio de los mejores equipos de la LVBP.
Desplazan a los Tiburones de La Guaira, se ponen a dos de empatar en el segundo puesto al Magallanes y están a ocho trofeos de empatar con los Leones del Caracas.

Por GUILLERMO YÁBER LLANOS

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