El pasado lunes se anunciaron a los nuevos integrantes del Salón de la Fama de Venezuela, al cual entraron Andrés Galarraga, Luis Aponte, Pedro Padrón Panza, Ángel Bravo, Teodoro Obregón y Lazaro Salazar.
Todos ellos tuvieron bien merecida su exaltación, por la influencia que tuvieron en la historia y desarrollo del beisbol, tanto en el país como fuera de sus fronteras, especialmente en Estados Unidos donde se juega al mejor nivel.
Este es un punto importante, porque tras la elección he escuchado a votantes hablando que para ellos en el Salón de la Fama venezolano sólo deben entrar esos peloteros que han tenido una espléndida carrera en la pelota local.
Ese planteamiento lo puedo respetar, pero no aceptar ni entender viniendo de personas con años dentro del beisbol y que, se supone, deberían entender el valor que para el país y para nuestra pelota han tenido las carreras de los venezolanos en Grandes Ligas.
Es que acaso no midieron el impacto de los logros de Andrés Galarraga (primer venezolano en ganar del título de bateo) y Oswaldo Guillén (primer manager extranjero en conquistar una Serie de Mundial), por mencionar a dos que estuvieron esta elección.
Recuerden que el beisbol está más allá de nuestras fronteras. Galarraga debió estar más cercano al 100 por ciento de los votos, y Guillén debió ser exaltado.
Todos ellos tuvieron bien merecida su exaltación, por la influencia que tuvieron en la historia y desarrollo del beisbol, tanto en el país como fuera de sus fronteras, especialmente en Estados Unidos donde se juega al mejor nivel.
Este es un punto importante, porque tras la elección he escuchado a votantes hablando que para ellos en el Salón de la Fama venezolano sólo deben entrar esos peloteros que han tenido una espléndida carrera en la pelota local.
Ese planteamiento lo puedo respetar, pero no aceptar ni entender viniendo de personas con años dentro del beisbol y que, se supone, deberían entender el valor que para el país y para nuestra pelota han tenido las carreras de los venezolanos en Grandes Ligas.
Es que acaso no midieron el impacto de los logros de Andrés Galarraga (primer venezolano en ganar del título de bateo) y Oswaldo Guillén (primer manager extranjero en conquistar una Serie de Mundial), por mencionar a dos que estuvieron esta elección.
Recuerden que el beisbol está más allá de nuestras fronteras. Galarraga debió estar más cercano al 100 por ciento de los votos, y Guillén debió ser exaltado.
Fuente: http://deportes.eluniversal.com/2010/04/18/beigl_art_grand-slam_1864917.shtml
Por Billy Russo
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